La economía social es un modelo económico que prioriza el bienestar y autonomía de las personas participantes, la sostenibilidad y el interés social y económico general, por encima del capital.
Uno de los principios fundamentales de la economía social es la promoción de la igualdad de oportunidades para colectivos en riesgo de exclusión social. No se trata solamente de generar empleo, sino de ofrecer oportunidades de empleo estables y de calidad, que promueven la conciliación entre la vida profesional y personal.
La innovación es un elemento clave para la transformación social y laboral a través de la economía social. La implementación de nuevos productos o servicios, junto a la adaptación y mejoría de modelos ya existentes, puede generar puestos inclusivos en nichos no previamente explotados.